Nota de Prensa.
Para el sindicato, la aprobación de este acuerdo llevaría a la destrucción de cientos de miles de puestos de trabajo, la desregulación de nuestros estándares ambientales, laborales y sociales, y una entrada al dumping social y a la ruptura del Estado de bienestar en los términos en los que los conocemos ahora
La Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) de CCOO muestra su más absoluto rechazo a la posición que adoptó finalmente ayer la Comisión de Mercado Interior (INTA) del Parlamento Europeo, en relación con la decisión que debe tomar la Eurocámara sobre el tratado de libre comercio entre la Unión Europea y Estados Unidos, el conocido como TTIP, cuyo rechazo reúne ya cerca de dos millones de firmas en toda Europa.El resultado de la votación, de 28 votos a favor y 13 en contra, da así el visto bueno al debate que se tiene que celebrar en la Eurocámara el 10 de junio, en el que el pleno del Parlamento Europeo decidirá si aprueba definitivamente las negociaciones del Tratado que está llevando a cabo la Comisión.
“Si bien se introducen elementos fundamentales como la valoración por lista positiva o la exclusión de los servicios públicos, pero no así el cabotaje marítimo ni la liberalización del espacio aéreo, entendemos que se ha permitido la adopción del mecanismo ISDS, con el apoyo de los representantes del PP y del PSOE, basándose en la propuesta de Cecilia Mälstrom, y que se diferencia únicamente de la propuesta actual en que se crea además un mecanismo que permite la apelación del ISDS pero según las normas de la Organización Mundial del Comercio”, afirma Fátima Aguado, secretaria de Internacional de FSC-CCOO.
Aguado aclara que la FSC-CCOO rechaza la cláusula ISDS, puesto que vulnera el marco jurídico de la UE conocido hasta ahora y da más poder a las multinacionales frente a los Estados y a la ciudadanía.
“No es de extrañar —señala Fátima Aguado— que la patronal europea, Businesseurope, haya celebrado el resultado de la votación en un comunicado en el que plantea, sin embargo, que no entiende por qué se plantea la exclusión de los servicios públicos del TTIP, cuando las formas de financiación de dichos servicios no son meramente estatales”.
El 27 de mayo, la FSC-CCOO envió a todos los eurodiputadas y eurodiputados españoles de la Comisión INTA una carta y un documento elaborado por el sindicato en defensa de los servicios públicos, en el que se especifican claramente cuáles son sus reivindicaciones. “Parece todo una pantomima que permita terminar de dar el visto bueno a la Comisión para negociar algo más que un acuerdo transatlántico, un acuerdo que llevará a la destrucción de cientos de miles de puestos de trabajo, la desregulación de nuestros estándares ambientales, laborales y sociales, y una entrada al dumping social y a la ruptura del Estado de bienestar en los términos en los que los conocemos ahora”.